La presencia creciente de las trasnacionales extranjeras en el sudeste mexicano produce una acelerada ruptura del tejido social en las comunidades indígenas. Dos defensores de Oaxaca solicitaron el apoyo suizo en la defensa de los derechos humanos en esa entidad, durante una gira europea organizada por las Brigadas Internacionales de Paz (PBI).
“Vivimos un aumento preocupante de la militarización en nuestra zona y nuestras comunidades con la respectiva pérdida de derechos elementales, como el de circulación o asociación”, afirma Rosalinda Dionicio Sánchez de la Red de Defensoras y Defensores Comunitarios de los Pueblos de Oaxaca (REDECOM). “Queremos informar a las autoridades y a la sociedad civil suiza lo que estamos viviendo. Compartir nuestras preocupaciones. Y advertirles en nombre de la autodeterminación de los pueblos, la importancia que, en Suiza, en Europa, en el Norte, se establezcan controles humanos y ambientales a la política de sus empresas que llegan a nuestros países”.
Afirmación también compartida por Marcos Leyva Madrid, de Servicios para una Educación Alternativa (EDUCA), organización no gubernamental que acompaña a las comunidades oaxaqueñas y prioriza la información, la formación, y la defensa de los derechos humanos. “Si ya sufríamos la presencia de mineras, hidroeléctricas, parques eólicos, gasoductos y súper carreteras, lo que preocupa actualmente a las comunidades es el proyecto de crear en nuestro Estado una de las Zonas Económicas Especiales programadas en el país, facilitando aún más la llegada masiva de las transnacionales a Oaxaca”.
Fuente original: EDUCA